Dioses celtas, nombres y características.


·      Epona: Epona es la diosa de los caballos. Los caballos eran considerados los animales en los que se transportaban los dioses. El nombre de la diosa proviene de la épica francesa, en la que su nombre significa literalmente “caballo”. Algunos historiadores relacionan a Epona con Lady Godiva, mujer inglesa del S. XI que protestó contra los altos impuestos asignados a los pobres, y que atravesó la ciudad de Coventry montada a caballo y desnuda.

Epona era una diosa femenina, representada por los celtas como una yegua divina.  Se le asociaba la fertilidad de la tierra, y años después, también las carreras de caballos y las guerras, debido a que en las campañas se utilizaban los caballos. En Alemania, Epona era asociada como guía espiritual de los muertos, y en Irlanda como dueña de las pesadillas, aunque en la mayoría de lugares era una diosa protectora del saber.

Epona fue también una de las muchas diosas adaptadas a la religión Romana. Cuando las tropas llegaron a Galicia, descubrieron a la diosa, y la llevaron a Roma. Instauraron el 18 de diciembre como su fiesta oficial, y la nombraron diosa de las vacas, los asnos, y los bueyes, además de los caballos.

 

·      Taranis: el culto a este dios se dio, principalmente en Galicia, Asturias, y la Bretaña francesa. Taranis es el dios del trueno y de las grandes tormentas. Junto a Ésus y Teutates, dioses del bosque y uno de los de la guerra respectivamente, forma la tríada de “los dioses de la noche”. A estos dioses se les temía mucho y se les hacían sacrificios humanos (generalmente de prisioneros de guerra) para aplacar su ira.

A Taranis se le suele representar como un hombre con barba, que puede o no estar montado a caballo, y que lleva un rayo en una mano, la rueda cósmica[1] o ambas. Debido a  su relación con la rueda cósmica, también se le atribuyen el universo y la noción del infinito.

Otro de los atributos de Taranis es el muérdago, fruto de que el dios dejara caer un rayo sobre una rama de roble, y que representaría la unión perfecta entre el cielo y la tierra.

·      Morrigan:  Morrigan era la diosa celta de la guerra, del pánico y del auxilio en la batalla. Según las leyendas, se sabe que se aparecía durante las batallas. Sus formas de representación más habituales eran la de una mujer, la de un cuervo, o la de una corneja[2].

·      Brighid: Brighid es la diosa de la curación, de la adivinación y de la inspiración. Según la leyenda, Brighid tenía dos hermanas con el mismo nombre, por lo que era considerada una diosa triple celta. También se dice que nació con una llama sobre la cabeza, y que eso la unió al universo. Otras fuentes dicen también que Brighid fue hija de Dagda. También era un tripartito con las tres funciones sociales celtas: la sacerdotal como diosa de la inspiración y la poesía, la clase guerrera como protectora de los guerreros y de los reyes, y la del pueblo al ser la diosa de las técnicas.

·      Cernunnos: Dios de los animales salvajes. Se representaba como un hombre barbudo, con largos cuernos de ciervo, sentado en meditación, y con animales salvajes a su alrededor, que solían ser una serpiente, un oso, un lobo y un cuervo. El jabalí era uno de los animales adorados por los celtas, representante de los guerreros, y manjar de los dioses.

·      Lúgh: Dios celta que aparentemente no tenía ninguna función específica. A pesar de que su nombre significa literalmente “luz”, se cree que no se trata de del dios del sol, ya que para los celtas, el sol era femenino, y la luna masculina.

·      Dagda: Dagda considerado el dios supremo del panteón irlandés. Es el dios de los elementos, de la sabiduría, el dios juez, y el de los druidas, por lo que cuando estos hacían algún rito, él debía estar presente. Era el padre y protector de todos los celtas, y se le denominaba como “dios bueno”, aunque por ser bueno en todo, y no por una cualidad moral enfocada al bien. También era el dios de la vida y de la muerte en su faceta de juez. Por lo visto tenía un mazo que golpeaba para dar o quitar la vida. Un lado daba vida, y el otro la arrebataba. Su nombre significaba “roble”, otorgado por su gran fortaleza.

·      Ésus: Es el dios de los arboles y el protector de los bosques, que tiene a su cargo algunos dioses menores de aire, tierra y agua. Es famosos por su representación al pie de un pilar talando un árbol.

·      Teutates: También era conocido como Tutatis. Era el dios de los pueblos, y se cree que era el predecesor a la humanidad. Se le atribuyen los elementos del fuego. También era el dios de la riqueza y la prosperidad. Cada pueblo tenía su versión de este dios, se le conocía también por el nombre de Albiorix, “rey del mundo”, o Caturix, “rey de la batalla” .

 

Aunque estos dioses tenían también atributos de la naturaleza, los encargados de protegerla eran los dioses menores como las salamandras para el fuego, las ninfas para el agua, las sílfides para el aire, y los gnomos para la tierra.

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